El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, declaró hoy en Argel que los actos terroristas no tienen ninguna justificación, por lo que deben ser condenados sin paliativos. Ki-moon hizo esta declaración a su llegada a la capital argelina donde presidirá un acto en memoria de los empleados de la ONU que fallecieron en los atentados terroristas perpetrados el pasado día 11. A lo largo del día el secretario se entrevistará con el presidente Buteflika.
«El terrorismo no puede tener nunca una justificación y debe ser objeto de condena en nombre de la humanidad y de la comunidad internacional», subrayó. Según dio hoy a conocer el ministro argelino de Solidaridad, Djamel Ould Abbes, el doble atentado suicida de Argel causó 41 muertos, 17 de ellos empleados de Naciones Unidas.
En una declaración a la radio de Estado, el ministro explicó que hubo 177 heridos, de los que una veintena permanecen hospitalizados, al tiempo que precisó que 14 de los empleados de la ONU fallecidos eran argelinos y los otros tres, extranjeros.
El doble atentado, reivindicado por el grupo Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), tuvo como blanco un edificio que alberga representaciones de la ONU en Argelia, así como las sedes del Tribunal Supremo y el Consejo Constitucional.
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