La Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia ratificó la condena de diez años de prisión que impuso un tribunal a dos miembros de la Policía Nacional, quienes fueron encontrados culpables de propinar una golpiza y herir de bala a un estudiante de publicidad hijo de un profesor universitario.
El tribunal que ese entonces era presidido por Hugo Álvarez Valencia, tomó la decisión tras rechazar un recurso de casación presentado por los abogados de los agentes Carlos Miguel Cuevas Pérez y Julio Soto Reyes.
El padre del herido, profesor Juan Tomás Olivero, aplaudió la decisión tomada por el tribunal y pidió al jefe de la Policía, mayor general José Armando Polanco Gómez, que los dos miembros de la institución que se encuentran detenidos en Operaciones Especiales de Manoguayabo, en el Distrito Nacional, sean remitidos a la Dirección General de Prisiones para que los envíen a la cárcel correspondiente.
Miguel Abraham Olivero, recibió una golpiza y un disparo, y estuvo a punto de ser asesinado por los agentes policiales.
El joven estudiante de publicidad fue agredido el cuatro de enero del 2009 y luego llevado por ambos agentes al hospital Darío Contreras para recibir atenciones médicas. A causa de la brutalidad policial, Miguel Abraham, sufre traumas que han afectado su desempeño.
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